QUERIDA FAMILIA

Yo, que trabajo desde la rama de un árbol tecleando las palabras que me susurran personas que, sobre unas ruedas, intentan mantenerse en un equilibrio vital casi imposible…

Un equilibrio difícil, porque cuesta mucho abstraerse de la realidad que nos ha tocado vivir a cada uno de nosotros.

Yo, que miro desde la lejanía que precisa navegar en solitario por la red y los circuitos internaúticos, me siento acompañada por sonrisas sin disimulo, esperanzas y esfuerzos, que, a pesar de las circunstancias, se van viendo recompensadas poquito a poco.

Entonces es preciso sentarse, reflexionar hacia donde se va a dar el siguiente paso… quizás el siguiente paso sea simplemente valorar lo que somos, lo que tenemos y ponernos en el lugar del otro, ese otro que espera que tú le des un abrazo cuando menos se lo espera…que no da las gracias porque ya se sobreentiende y que, con sólo una mirada, te cuenta lo que necesita.

No somos extraordinarios, ni superhéroes, ni arregla mundos…

Aún hay mucho que hacer, muchos ratos que padecer y disfrutar… mucha historia que contar…porque esto…esto es sólo el principio.

Así que prometo bajar un día de mi árbol virtual, dejar que me crezcan ruedas en los pies e intentar mantener el equilibrio junto a vosotros, los ya conocidos y los que están a punto de subirse a ésta hermosa caravana.

Una bonita familia.

Alicia (malisia)